¿Necesitas un traductor jurado que otorgue validez legal a la traducción de tus documentos oficiales?
La traducción jurada consiste en trasladar textos jurídicos de una lengua a otra para dar fe del valor legal que estos tienen. El traductor profesional que se encarga de estos proyectos se denomina traductor jurado. Dicho profesional está debidamente acreditado en el ámbito internacional por los organismos propios de cada país para realizar su trabajo.
Consiste en traducir documentos oficiales haciendo que conserven toda su validez jurídica, esto es, que sigan siendo admisibles por los organismos a los que van destinados. Normalmente tales organismos son entidades públicas o gubernamentales (estatales o locales), así como los tribunales de justicia.
El contenido de estos documentos puede ser de lo más variopinto, ya que no están circunscritos exclusivamente al ámbito legal: hay muchos escritos con validez jurídica cuya temática nada tiene que ver con el mundo jurídico. Por consiguiente, no hay que confundir la traducción jurídica con la traducción jurada, ya que esta última engloba muchas más disciplinas.
Algunos de los ejemplos más comunes de traducción jurada son los siguientes documentos, necesarios para realizar multitud de trámites legales ante las autoridades:
También podemos encontrar ejemplos de traducción jurada en las pruebas que se aportan durante los procesos judiciales en el derecho internacional. Por ejemplo, un informe pericial traducido solo será válido ante un tribunal si ha sido traducido por un traductor jurado.
La traducción jurada constituye un caso peculiar de traducción profesional, pues solo es posible conservar la validez jurídica de estas traducciones si han sido realizadas, firmadas y selladas por un traductor jurado. Este profesional de la traducción cumple, por lo tanto, una doble función:
Cabe destacar que no es necesario que el mismo traductor oficial complete ambas fases: cualquier traductor profesional no oficial puede traducir el documento, pero este no será válido sin la revisión y posterior rúbrica de un traductor jurado.
Para que un traductor internacional pueda desempeñar la función de traductor jurado, este debe estar debidamente acreditado por las autoridades de cada país. En concreto, la normativa que regula la traducción jurada en España se encuentra en el Real Decreto 2555/1977, de 27 de agosto.
Según este reglamento, los traductores jurados que operan en nuestro territorio deben cumplir los siguientes requisitos:
Una vez que el traductor cuenta con esta acreditación, pasa a incorporarse a un directorio de traductores jurados que está disponible en el sitio web del MAEC. Tanto una agencia de traducción como un cliente interesado pueden consultar esta lista y elegir al traductor oficial que deseen.
Este es el perfil del traductor jurado que colabora con una agencia como sanscrit: un traductor oficial debidamente acreditado y que da fe del valor legal de los documentos traducidos.
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Tipos de traducciones juradas:
Otras especialidades de traducción técnica