Pocas disciplinas profesionales a nivel internacional presentan la complejidad y la criticidad de la medicina. Las características de su lenguaje específico y su incidencia directa en la salud pública hacen que la traducción profesional cobre una relevancia especial en el ámbito médico.
¿Por qué es tan importante la traducción médica?
Todos los profesionales que trabajan en los campos de las ciencias de la vida y de la salud asumen una gran responsabilidad. Los contenidos que se generan contienen información altamente sensible y, debido a ello, una interpretación incorrecta de dichos datos podría tener consecuencias muy graves. Por lo tanto, la traducción médica se caracteriza por ser precisa, clara y veraz.
En el ámbito de la documentación médica existen multitud de estándares y protocolos de estilo y formato. En consecuencia, la agencia de traducción que se focalice en el sector médico debe conocer las normas propias de todos los tipos de documentos y respetarlas siempre en sus traducciones.
Además, la traducción médica se ha de enfrentar a otro exigente reto: aunque el público que requiera de estas traducciones no tenga por qué dominar ningún lenguaje específico, es responsabilidad del traductor dotar de la máxima claridad posible al texto final. De poco sirve un documento perfectamente traducido según las normas si el paciente no entiende nada de lo que lee.
El papel del traductor profesional médico
Los proyectos de traducción médica deben ser abordados por una agencia o traductor internacional que posea un conocimiento muy profundo de cada especialización. Solo este perfil de traductor puede interpretar correctamente el lenguaje técnico de los textos pertenecientes al campo de la medicina, donde abundan la polisemia y los falsos amigos (false friends).
Asimismo, el traductor debe conocer las normas de estilo propias de cada tipo de documento:
En los ensayos clínicos, una coma mal puesta o un error en la nomenclatura de las unidades de medida puede provocar retrasos importantes en la aceptación del estudio.
Las autoridades sanitarias podrían rechazar una solicitud de patente de un medicamento si el texto no se ajusta a los parámetros requeridos por ley.
Los textos divulgativos, si bien deben contener información veraz y precisa, deben traducirse usando un lenguaje más llano y cercano para que, precisamente, el escrito final cumpla con su propósito.
El traductor o la empresa que aborden estos proyectos deben saber distinguir el objetivo de cada traducción, así como adaptarse al registro y normas de los destinatarios, de modo que vele siempre por respetar la terminología propia de cada área de la medicina. En resumen, se precisa de un traductor de los que colaboran con una agencia como sanscrit.